Tilda es mucha Tilda. Y hace cuestión de horas lo ha vuelto a demostrar. Su nombre era uno de los principales reclamos de la inauguración del Festival de Sitges, donde estaba programada la entrega de un premio honorífico a toda su carrera. Las semanas previas a esta cita, con su padre muy enfermo, no fueron sencillas para la actriz, que estuvo en Escocia, a su lado, esperando su final. Horas antes de recoger el galardón y tener que coger un avión para España, el padre de Tilda Swinton murió. Y ella ha subido al escenario, muy emocionada, para contar su historia.