La grabación pertenece a 2011, en pleno parón de la Liga, cuando Lebron y Durant se aburrían y decidieron probar con los micros. El rap ha visto la luz siete años después y está causando furor en Estados Unidos. Muchos ortodoxos del hip-hop han puesto en valor el buen niveld e Durant… y no tanto el de Lebron. Lejos de ser una crítica, casi todo el mundo en EEUU coincide en que ya era hora de ver al jugador de los Lakers haciendo algo solo ‘regular’.