Julie no ha tenido una vida fácil por su sobrepeso, pero tras casi asfixiarse con su propio peso mientras dormía, cambió su vida por completo. Con tres hijos, esta canadiense comenzó a realizar deporte y a tener buenos hábitos alimenticios bajando de los 131 kilos. Un espectacular cambio gracias a los efectos del deporte con el que ha logrado sentirse bien consigo misma.