Donald Trump parece empeñado en saltar de una polémica a otra, esta vez con una de marcado carácter deportivo: el presidente de los Estados Unidos recibió a la delegación de su país en los Juegos Paralímpicos. Todo iba bien hasta que Donald, en su discurso de agradecimiento, afirmó que este evento deportivo "fue difícil de ver". ¡La polémica está servida!