Polémica en EEUU. La banda del instituto Brookwood (Georgia) no vivió su mejor momento durante el último partido de fútbol de su equipo. En plena performance, los músicos exhibieron un mensaje racista a través de las letras adheridas a sus instrumentos.
Después de la tormenta desatada, el director del colegio se ha dirigido a los padres del alumnado anunciando que se ha abierto una investigación. Sin embargo, muchos de los progenitores no quieren que los protagonistas de este nefasto incidente sigan un segundo más en el centro de enseñanza. "¡Deben ser expulsados!", insisten.