Tras sobrevivir a la fatídica segunda ronda de preguntas en el juego de la sinceridad, el grupo intentará relajarse un poco con una pequeño momento de relax, ¡pero todo en esta cena tiene truco! A todos nos gusta el día de los santos inocentes y nuestros invitados no son la excepción. Todo el grupo jugarán juntos y contarán diferentes secretos. La trampa está en que algunos son mentira. ¿Son unos buenos mentirosos?
Además, lo que parecían unos chistes sin importancia acaban revelando algo que Fabio mantenía oculto y hubiera preferido que Violeta no se enterara de ello. ¿Cómo reaccionará Violeta al saber de esa faceta oculta de su novio? Solo nos queda decir… ¡INOCENTE!