Este pequeño de Ohio, Estados Unidos, tiene solo dos años, pero se sabe a la perfección todos los movimientos de Rocky. Desde el salón de su casa repite todos lo puñetazos, flexiones, abdominales, planchas y un largo etcétera de ejercicios. Todo un ‘crack’ con el que Jero García se ha quedado impresionado y es que ya ha pedido su número de teléfono para meterlo en su escuela de boxeo.