Un vendaval ha sacudido, sin previo aviso, Novelda, Santa Pola y Elche. A su paso ha derribado árboles, vallas publicitarias y muros. Por suerte, ha sido de madrugada y eso ha evitado daños personales. No obstante, las fuertes rachas de viento han tenido a la Policía Local sin descanso para remediar todos los desperfectos causados.