Lo que inicialmente iba a ser una clase de buceo, acabó siendo una misión de salvamento de un tiburón nodriza gris en Australia. Un buceador español salvó la vida del escuela tras varios minutos, una cuerda colgaba de la boca del animal. Por desgracia, esta imagen es habitual en nuestros mares y océanos debido a las miles de toneladas de plástico que se vierten. Los ecologistas advierten de la necesidad de tomar conciencia.