Estos días hace más frío en el norte de Estados Unidos que en Siberia y los grandes lagos se convierten en pistas de patinaje. Hasta -50°C de sensación térmica y vientos capaces de congelar en menos de 15 minutos, como ya ha pasado con cuatro personas que han perdido la vida por el temporal. La peor ola polar desde que hay datos se extiende por el país.